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Variante de 20 km que nos brinda unas buenas panorámicas del extremo meridional soriano del valle del río Henar, enlazando los pueblos de Deza y Cihuela, y pasando por los restos del despoblado de Mazalacete. La ruta asciende a las parameras y paisajes esteparios de las partes altas de la cuenca, cruzando cultivos, pinares de repoblación, tomillares y romerales en afloramientos de yesos; luego desciende al valle del Henar, cruzando en dos ocasiones el río. Cihuela se localiza en el valle del río Henar, a los pies del castillo roquedo del siglo XII o XIII, que domina la entrada al valle. El castillo presenta un estrecho recinto alargado que se adapta a la superficie del cerro sobre el que se yergue. Construido con muros de mampostería concertada y sillares en la torre, conserva todavía algunas almenas. En el pueblo se encuentra la iglesia de Nuestra Señora de la Ascensión, del siglo XVIII, con planta de una sola nave y capillas laterales en el crucero. Sus muros están rematados con almenas y su torre con campanario.

Destaca la presencia del antiguo palacio renacentista de los Duques de Medinaceli, muy alterado en la actualidad. Construido con muros de mampostería y sillería en la fachada principal, destaca la decoración escultórica renacentista en la ventana del torreón, incluido el escudo ducal. En el entorno podemos visitar la ermita de San Roque del siglo XVIII. El paisaje que divisamos desde las partes más altas del recorrido pertenece a la cuenca del alto Jalón, formando parte de la gran cuenca mediterránea del río Ebro.

La comarca del Jalón es una de las pocas áreas geográficas orientales castellano leonesas de la vertiente del Ebro, y la única junto con las más norteñas de los ríos Añamaza, Alhama y Val, también de la misma vertiente, que presentan un fondo biológico común con otras áreas esteparias bajo aragonesas, donde la condiciones de aridez, con precipitaciones que apenas superan los 300 mm anuales, marcan profundamente un paisaje vegetal de manifiesto carácter mediterráneo.

El romero (Rosmarinus officinalis) o la sabina mora (Juniperus phoenicea) son dos especies habituales en este paisaje. La presencia de ambas delimita perfectamente la frontera de la influencia climática de la depresión del Ebro.

Desde la ermita de San Roque hacia Cihuela vemos una llanura dominada por campos de labor entre los que se alternan pequeñas parameras calcáreas muy rocosas, desprovistas de vegetación arbórea y tapizadas de matorrales y herbazales de bajo porte resistentes al viento y al pastoreo de ovejas. Tal paisaje de mosaico en llanura da lugar a un importante hábitat para aves esteparias muy raras y amenazadas, hasta tal punto que ha sido propuesta como ZEPA dentro de la cadena de espacios naturales europeos de la Red Natura 2000. Esta área de protección denominada ZEPA Cihuela-Deza, con sus 4.479 hectáreas, es la ZEPA de menor extensión de toda la provincia. Su valor radica en la presencia de importantes poblaciones de aves esteparias de mediano tamaño como ganga ortega, sisón y alcaraván, sobresaliendo por ser una de las mejores zonas de la provincia para ganga ortega.

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Ciclabilidad

100%

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